El dolor es algo que en ocasiones no sabemos como llevar. Que viene a poquitos, aguantando, luchando, sacando todas nuestras fuerzas y llega un punto que estas tan agotado, que has dado tanto que no queda nada dentro de ti más que dolor y tristeza. Te quedas sin ganas, sin ilusión, sin fe y te das cuenta de que no sientes nada, que no sonries que no eres la misma si no una sombra que vaga, que sigue adelante pero nada más. Te das cuenta que es como si por dentro no tuvieras vida....
Últimamente se me ha pasado varias veces por la cabeza una contradicción. Y es que en esos momentos en los que sientes morir por amor, en los que te desesperas por la situación y no ves salida quisieras que todo fuera diferente. Tienes un fantasma rondandote día y noche, recuerdos, situaciones, y todo te persigue y no sabes si serás capaz de olvidar. Y el engaño y las mentiras no dejan de torturarte y las miles preguntas, todas las incognitas, tanta decepción no se van de la cabeza y por un momento pienso en la idea maravillosa de una poción. Una poción mágica que fuera capaz de hacernos olvidar, hacer como si no hubiera existido porque entonces todo sería más fácil, no sería tan duro el día a día y solo se trataría de continuar la vida tal cual era antes de todo. Pero aqui viene la contradicción... en realidad, en lo más profundo sabes que no serviría de nada, que incluso podría ser peor porque quizás todo eso que nos había echo madurar en cierta manera no existiría, así que sería com
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